¡Divino beso que me llevó al cenit! ... pero tan misterioso y profundo como el océano
de oleajes serenos que en su vaivén,
rompen tranquilos, con afinadas notas,
en el pentagrama de la arena blanquecina
que se extiende por toda la costa.
Yo, pequeño mortal ante aquella inmensidad,
pensativo, meditando… disfruto de aquel sublime atardecer,
hermosa playa del litoral; brisa fresca,
arena blanca, mar rojizo… destellante;
mirada fija al horizonte contemplo el ocaso.
pensativo, meditando… disfruto de aquel sublime atardecer,
hermosa playa del litoral; brisa fresca,
arena blanca, mar rojizo… destellante;
mirada fija al horizonte contemplo el ocaso.
A lo lejos, en el aire, ordenadas y planeando,
con admirable destreza, un centenar de gaviotas
adornan el inmenso lienzo de aquella hermosa panorámica.
con admirable destreza, un centenar de gaviotas
adornan el inmenso lienzo de aquella hermosa panorámica.
En tan bello lugar, paraíso terrenal,
bendición celestial, sobresale la esbelta figura
de la linda mujer que emerge del mar,
cual mítica sirena ancestral y de este tiempo.
bendición celestial, sobresale la esbelta figura
de la linda mujer que emerge del mar,
cual mítica sirena ancestral y de este tiempo.
Sirena y mujer; mujer y sirena,
en simbiosis perfecta camina hasta mí;
sin dejar de mirarme, se inclina y me besa.
¡divino beso que me llevó al cenit!
pero tan misterioso y profundo como el océano.
en simbiosis perfecta camina hasta mí;
sin dejar de mirarme, se inclina y me besa.
¡divino beso que me llevó al cenit!
pero tan misterioso y profundo como el océano.
Autor:@marcosmilano71
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